Con la celebración de este primer domingo de ADVIENTO damos inicio a un nuevo año litúrgico, y a este nuevo año litúrgico le corresponde el ciclo “C”, es decir el evangelio que escucharemos en los domingos del tiempo ordinario serán lecturas tomadas del “Evangelio Según San Lucas” de tal manera que en los tres ciclos que tiene el año litúrgico logramos leer los tres evangelios sinópticos a saber: ciclo “A” evangelio según San Mateo, ciclo “B” evangelio según San Marcos y el ciclo “C” evangelio según San Lucas. El evangelio según San Juan se lee en el tiempo de Pascua de tal manera que todos podamos escuchar los cuatro evangelios durante los domingos del año litúrgico.
Hoy el evangelio tomado de san Lucas nos presenta al Señor Jesús hablando a sus discípulos sobre señales en los astros y también en la tierra la gente vivirá una experiencia que les dejara sin aliento “por el miedo y la ansiedad ante la expectativa de lo que le viene al mundo.
Pero todos estos eventos son solo señales que marcan un momento decisivo en la historia humana y es que esas señales anuncian la venida del Hijo del Hombre que llega con poder y gloria y trae como misión liberar. Les hace saber a los discípulos que ellos no deben participar de “el miedo y la ansiedad” de la gente muy por el contrario deben asumir una actitud de confianza delante de Dios, por lo que se deben levantar, alzar la cabeza, como quien mira el horizonte buscando descubrir al que se acerca a ellos, el Hijo del Hombre que viene a liberar y la razón para hacerlo es que se acerca con Él su liberación.
También el Señor Jesús les advierte a sus discípulos sobre el cuidado que deben tener para que sus corazones no se entorpezca y es que se llega a eso por el exceso de comida, por las borracheras y las preocupaciones de la vida y es que al poner los discípulos su atención en estos menesteres es que se distraerán de lo importante y lo importantes es estar atentos a la llegada del Hijo del Hombre que viene a liberar de la esclavitud del pecado para que vivan en la libertad de los hijos de Dios.
De allí que vuelve a insistir en su enseñanza a sus discípulos de que deben estar “siempre vigilantes y en oración… para mantenerse de pie delante del Hijo del Hombre… porque no hacerlo los pone en peligro de perder su propia liberación
Hermanos y hermanas la enseñanza del evangelio de este domingo primero de Adviento es una invitación a ponernos en actitud vigilante para no descuidar nuestras tareas cotidianas y en oración como expresión de estar en la presencia de Dios de manera consciente y voluntaria hablando con aquel que nos amó primero y que es el destinatario de nuestro amor, amor expresado en cuanto nos esforzamos en hacer el bien y evitamos hacer el mal.
FELIZ AÑO NUEVO LITÚRGICO. BUEN INICIO DE ESTE TIEMPO DE ADVIENTO, TIEMPO DE ESPERANZA POR CUMPLIRSE…
