Mirar el evangelio de este domingo nos conduce a la alegría de una fiesta y con ella todas las anécdotas.
Cuando somos invitados a una fiesta (Matrimonio, 15 años, etc.) la tarjeta normalmente tiene una parte donde se indica la forma en que ese día debemos llevar la ropa, ropa sport, de gala, etc. Es decir las indicaciones son claras, si a alguien no le gusta la forma en que debe ir vestido, simplemente no va y se deslinda de toda responsabilidad.
Entonces es curiosa la invitación que nos presenta el Evangelio. Hay una fiesta de boda y lo importante parece aquí ser el traje de gala. Esto podría tener muchos significados en la vida de cada persona, a veces podríamos decir que el traje no importa, porque lo que hace la persona no es lo que lleva puesto, sino lo que lleva en el corazón. Pero, para esta fiesta el traje sí cuenta. Esta fiesta parece indicar que sería la fiesta grandiosa de la entrada en el reino de los cielos y claro, nos ponemos a preguntar con qué traje voy a ir a ese gran día de fiesta, es un día que quedará marcado en nuestros corazones, porque es el día en que comenzaremos a participar de la Jerusalén celestial.
El traje de gala podría tener muchos significados, un traje de fiesta que sería nuestra fe, un traje de fiesta de la esperanza, un traje de fiesta con la caridad, un traje de fiesta con el servicio, el amor y la entrega y finalmente un traje de fiesta que resalte por todo cuanto hemos vivido según la voluntad de Dios. Entonces el traje si tiene un significado desde el vestido de la fe, del amor, la entrega en aquel que nos salvó.
Es hora hermanos de comenzar a tener todo listo para esta fiesta, llevar nuestra sencillez, la humildad de cuanto Dios nos ha dado, de lo poco que tenemos pero bien vestidos, es decir irnos con las herramientas suficientes para tener nuestro pase directo a esta fiesta, para poder estar con el novio, para poder compartir y brindar un Vino Nuevo, un vino donde la paz y la tranquilidad. No olvidemos que es el traje de fiesta de las bienaventuranzas, ellas son el mejor corte de tela que debemos llevar puestas, es el traje, es el proyecto, es el camino que el Señor a trazado para todos sus seguidores.
Por lo tanto en el reino de los cielos, en la fiesta celestial, será importante el intransferible por el hermano con cuánto amor le hemos servido, con cuánto amor nos hemos entregado al Señor y escucharemos la frase del Evangelio vengan benditos de mi Padre heredad el reino preparado para ustedes.
Hermanos estamos a tiempo para prepararnos el mejor vestido, es hora de mirarnos y preguntarnos, qué cosas me faltan para ese día. Solo así tendremos la seguridad que dentro de la fiesta nos encontraremos con todos aquellos que también supieron atender y servir al Señor en la tierra. Y cuidado con prepararnos para la fiesta del fuego eterno donde será el rechinar de dientes.
