El evangelio de este V DOMINGO DE PASCUA nos presenta al Señor Jesús después de celebrar la cena de Pascua y haberles lavado los pies a sus discípulos con lo que les daba ejemplo de cómo debería ser la relación entre ellos, hacerse servidores unos de otros, luego de anunciar que uno lo va a entregar y decirles que en el amor que se tengan unos a otros serán reconocidos como discípulos suyos.

Ahora les pide a sus discípulos que no se inquieten porque les ha dicho que donde Él va ellos no lo pueden seguir pero que sin embargo deben creer en Él de la misma manera que deben creer en Dios.

Pasa ahora a explicarles que para ir donde Él va a estar es necesario que Él los lleve para que ellos estén donde Él va a estar, y Él va a estar en la casa de su Padre. Mientras tanto deben estar sirviéndose unos a otros como expresión de amor entre ellos de la misma manera que Él los ha amado y ese amor lo ha expresado haciéndose servidor de todos.

Para que sus discípulos estén donde Él va a estar es necesario que se separen pues necesita prepararles un lugar en la casa de su Padre donde hay muchas moradas. Este tiempo de separación servirá por otro lado para que los discípulos en ausencia de su señor pongan en práctica el servicio y el amor entre ellos.

Como nos podemos dar cuenta por el ejemplo y el mandato dado por el Señor a sus discípulos la vida de fe, este pedido de Creer en dios y creer en el Señor, tiene que ver con obras que están enfocadas en hacer el bien al otro y no podía ser de otra manera ya que como buenos discípulos deben saber obrar a ejemplo del Padre de quién Jesús es su enviado y quien hace y dice lo que ha visto hacer y a escuchado a su Padre que está en el cielo. Queda claro entonces cual es el camino y cómo es posible conocer al Padre.

Por eso ante la interrogante de Tomás ¿Cómo podemos conocer el camino? el Señor Jesús le hace saber que Él es EL CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA. Camino porque hay que seguir sus huellas para llegar a donde Él Va a estar, la Verdad porque su propia vida se ha hecho servicio para los demás y los ha amado hasta el extremo, como lo demostrara más adelante cuando acepte morir en la cruz para que todos se salven y por la misma razón se convierte en Vida porque todos sus discípulos deben hacer lo mismo y cuando sean capaces de hacer eso entonces conocerán al Padre es decir llegaran a reconocer que Dios cuida de todos y les hace el bien por puro amor suyo y los hijos deben aprender a vivir como vive el Padre.

Felipe pide al Señor Jesús que les muestre al Padre y entonces Él le dice que quien lo ve a Él ha visto al Padre y justamente porque el Padre está en Él es que es capaz de hacer las obras que le han visto realizar y las palabras que les ha dicho se las ha dicho porque Él ha escuchado al Padre. He ahí la razón por lo que pide que crean en Él por las obras que le han visto realizar. Como quién dice creer en Él lleva al creyente a realizar obras como testimonio de su fe en Él.

  

Y termina el evangelio presentando al Señor asegurando a sus discípulos que quien cree en Él será capaz de hacer las obras que le han visto realizar a Él e incluso otras mayores y eso será posible porque el señor Jesús va al Padre.

Nosotros hermanos y hermanas a la luz de este evangelio podemos aprender cómo iban aprendiendo los discípulos en aquel tiempo. Pero será importante poner mucha atención a los ejemplos que Él nos va dando y a las enseñanzas que de parte del Padre nos da. Cuando hagamos esto entonces nos iremos asemejando a nuestro Señor que escucha al Padre, que sirve a los suyos y que ama a todos y nos ama a todos porque su Padre que está en el cielo nos ama a todos y prueba de ese amor es que a todos nos quiere salvar.

NUESTRO CRISTIANISMO NO SOLAMENTE DEBE LLEVARNOS A ORAR, QUE ES UNA COSA MUY BUENA, SINO QUE TAMBIÉN NOS DEBE LLEVAR A SERVIR.

DE OTRA MANERA SIEMPRE FALTARÁ ALGO MUY IMPORTANTE EN NUESTRA VIDA DE FE.    

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